Periódicos de México: la pandemia agrava al enfermo crónico
José Soto Galindo
12 octubre, 2020La pandemia de coronavirus, de súbito, restará -14% de los ingresos totales de los periódicos de México en 2020 (sin pandemia, el pronóstico para este año era de -1.17%). A detalle, las pérdidas se reflejarán en una reducción de -11% de los ingresos por circulación (el número de unidades distribuidas en promedio) y de -25% en publicidad impresa y digital respecto a 2019, de acuerdo con los pronósticos de la consultora PwC México.
Las previsiones ya eran negativas desde hacía tres años, cuando el volumen total de negocio de los periódicos llegó a su techo y comenzó a descender a un ritmo menor a 1% anual. Pero la pandemia lo echó todo a perder: aceleró el ritmo de la caída, de una tasa de crecimiento anual compuesto de -1.2% a 2023 a una de -3.83% a 2024, según las proyecciones del estudio Global Entertainment & Media Outlook (GEMO) 2020-2024 de PwC México.
Este nuevo escenario se suma a un rosario de malas noticias para la industria de las noticias. El sector ya estaba diagnosticado como enfermo crónico —o como antes se decía en Facebook: en una relación complicada— y el año 2020 y su Covid-19 significarán la pérdida definitiva de otra talla a su peso ideal.
Cientos de periódicos y sitios de noticias deberán repartirse apenas 5% del total de la inversión publicitaria de 2020, calculada en 96,500 millones de pesos (1 dólar = 19.24, en la cotización base de PwC), y en un año donde se prevé una caída de la economía nacional de alrededor de 10%. De hecho, toda la industria de medios y entretenimiento registrará una caída de 6.4%, de acuerdo con el GEMO 2020-2024.
Tampoco hay posibilidad de echar mano de la ayuda del gobierno federal, que cumplió su promesa de recortar al máximo su gasto en publicidad oficial: en 2019, primer año de López Obrador, el gobierno ejerció apenas una tercera parte de lo ejercido en el primer año de Peña Nieto (3,245 millones de pesos contra 9,632 millones, con cifras actualizadas en julio). 2020 no será diferente. El ambiente se volvió darwinista para los periódicos: sobrevivirán sólo los periódicos más aptos para vivir del mercado.
“La naturaleza de cada medio es distinta y también es cierto que con las diversas plataformas digitales se ha propiciado la fragmentación de las audiencias. Sin embargo, esto no significa que la naturaleza económica de la industria cambie. Simplemente se adapta de forma natural al nuevo entorno”, dijo María Elena Gutiérrez Rentería, investigadora de la Universidad Panamericana y responsable del capítulo México del Digital News Report del Reuters Institute, consultada para este artículo.
La vertical de publicidad será la más lastimada en 2020, aunque esta pata ya venía cojeando: alcanzó su máximo histórico en 2014 y luego comenzó a caer a un ritmo anual de 3% hasta encontrarse con el coronavirus y perder, de tajo, un cuarto de su valor para las compañías. Ahora aportará apenas 2 de cada 10 pesos a los periódicos.
“Poco a poco, como se preveía, la mayor parte de los periódicos serán solamente digitales. Lo que la pandemia vino a hacer es a acelerar este proceso”, dijo Juan Larrosa, profesor investigador del Iteso y coordinador de Etius Observatorio de Comunicación y Cultura, consultado para este artículo.
Gutiérrez Rentería es optimista: sabe que donde hay ruptura también existen oportunidades de transformación y construcción de nuevos modelos de negocio. Y aunque la recuperación de la vertical de circulación de los periódicos está prevista en una “L” (caída súbita y luego estabilización), esta académica experta en industrias mediáticas confía en la capacidad de reinvención: “Algunos empresarios han sabido aprovechar las circunstancias del entorno macro y micro para tener mayor participación y penetración en la industria a escala nacional, incluso, algunas en el mercado internacional”.
Larrosa dijo: “Me parece que muchos periódicos dejarán de circular; otros dejarán de circular los siete días de la semana; otros imprimirán menos hojas y con un papel y tinta de menor calidad; otros buscarán alternar su producto con servicios de radio, televisión y formato digital”.
Necesariamente ese nuevo estado de la industria de los periódicos, al que sólo llegarán los más preparados en términos de servicio y negocio, será uno basado en la confianza, la reputación y la calidad que las compañías periodísticas puedan brindar a sus audiencias. De otra manera, seguiremos leyendo malas noticias.