Increíble pero cierto es el nombre de una sección de El Deforma, uno de los sitios de contenido disruptores en la nueva generación de medios digitales de México. En esa sección, El Deforma colecta notas donde se burla de los medios que han caído en sus bromas. En la lista se incluyen medios tan reputados como La Nación de Argentina y el deportivo Marca, de la familia española que publica la cabecera de noticias económicas Expansión.

En mayo, El Deforma conquistó la mayor cantidad de visitantes únicos desde computadoras y laptops. ¿Increíble? No. Es cierto. En la segunda entrega del ranking de medios nativos digitales de México, que sólo analiza sitios que nacieron en Internet, El Deforma logró 1.4 millones de visitantes únicos en tráfico en mayo. De acuerdo con el artículo de Daniela Bermúdez, analista de tráfico de El Economista, los números de El Deforma se vieron favorecidos por una buena colección de sátiras previas a las elecciones del 7 de junio.

En móviles, que es el segmento que más crece en México, UNOTV es líder indiscutible, pero El Deforma incluso ahí tiene parque para dar batalla desde la tercera posición conquistada. Y aunque por ahora la medalla de oro de El Deforma se encuentre en una categoría que pronto llamaremos “tradicional”, es relevante que ese medio de notas satíricas supere a cabeceras de afamados periodistas como Carmen Aristegui, Pedro Ferriz de Con o Joaquín López Dóriga. El Deforma también queda por encima de gigantes como Medio Tiempo, producido por el Grupo Expansión, y del propio UNOTV del magnate Carlos Slim, que ni siquiera se cuela a la lista de los 10 con mayor captación de tráfico en escritorio.

El Deforma, que toma su nombre del periódico Reforma y usa un cactus como avatar, es parte de una nueva ola de medios nacidos en digital como SDP Noticias, Sopitas, Juan Futbol y Horizontal. Se trata de sitios que provocan disrupción principalmente por sus narrativas informativas, cuyos símiles pueden encontrarse en cabeceras como BuzzFeed, Vox, Gawker y Medium, las grandes revelaciones del nuevo contenido en Estados Unidos.

La palabra clave es contenido. Se trata de lo mismo de siempre, de contar historias, pero se trata también de hacerlo para nuevos lectores, los que tienen a Facebook como su principal proveedor de noticias, que utilizan Instagram, Vine o Snapchat y que no tienen miedo de abrir una cuenta en Periscope para probar lo que permite esa aplicación.

Utilizan Uber y se hospedan por Airbnb. Y, sobre todo, no tienen miedo en cambiar. La revista Fast Company los llamó “la generación Flux”. En términos mercadológicos más extendidos, se les considera la generación Millennial. Y están llamados a transformar las condiciones que los rodean.

En la mejor tradición de los medios satíricos, como The Onion (Estados Unidos), The Clinic (Chile) o Barcelona (Argentina) e incluso El Jueves (España), El Deforma ha construido una identidad y ha conseguido que sus contenidos sean “compartibles” en medios sociales. Dos logros que en México pocos medios migrados a lo digital, lo que los expertos llaman legacy media, pueden adjudicarse.

“Entre los portales noticiosos más visitados en México hay uno que no tiene dinero ni está hecho por periodistas. No tiene oficinas ni dirección postal. Cuando inició, ninguno de los seis empleados sabía ortografía y, aún ahora, no se conocen entre ellos, salvo los dos creadores”, escribió el reportero Alejandro Almazán en julio del 2014 en un artículo para Vice (otro disruptor, nacido en Estados Unidos).

El Deforma pertenece a una generación que no pide permiso, que se atreve a experimentar e innovar (con nuevas narrativas, con nuevas formas de distribución, con nueva ingeniería), que se identifica con la nueva generación de lectores y que se divierte haciendo su trabajo. Una mística que muchos en la industria estamos perdiendo.

Este artículo se publicó en El Economista el 30 de junio de 2015.

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