Economicón 47º. Primicia: Policía militar contratará reconocimiento facial | El Presidente AMLO en el espejo | Otras noticias de la semana. Economicón es la newsletter de privacidad y sociedad de la información
El Inai encontró elementos para sancionar al presidente López Obrador por la exhibición de un documento que vulnera la privacidad de Loret de Mola. La oficina que determinará la sanción será el Órgano Interno de Control de Presidencia, cuyo jefe es López Obrador.
Defender ahora la privacidad de Loret de Mola es defender los derechos humanos de todos los ciudadanos. No se trata de Loret de Mola, se trata de la vigencia del régimen de protección de la vida privada a través del tratamiento legítimo de los datos personales.
En México, el viejo modelo de negocio de los medios contempla que la publicidad oficial cubra los costos de operación y la publicidad comercial ofrezca la rentabilidad. La única regulación es la electoral; lo demás son aspiraciones de autorregulación y aplicación de códigos deontológicos al interior de los medios.
Hay algo innegable: el presidente presentó datos sin verificación ni certeza de su origen, violando el principio de legalidad propio de su investidura.
La mesura debe colocarse entre las pérdidas más lamentables de nuestra vida política. No existe entre lo que antes conocíamos como la “oposición” y que hoy son sólo los contrarios y mucho menos existe en el Gobierno. Pero esta no es una cancha pareja y el Gobierno está más obligado a la mesura que cualquier […]
La peor forma de sociedad corporativa es 50/50 porque es muy difícil ponerse de acuerdo cuando hay conflictos. Aunque Grupo Prisa tiene 50% de Radiópolis, su posición es sumamente débil. En cambio, Corporativo Coral de la familia Alemán -que posee la otra mitad- tiene ventajas legales y el apoyo político del gobierno de AMLO para […]
5 agosto, 2019Fachada de la estación de radio XEW, que perteneció a Grupo Televisa, en la calle de Ayuntamiento, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Televisa, Interjet, Radio Centro, Imagen y El Heraldo son algunos de los grupos que han movido la radio en México en los meses recientes. Ese medio centenario no ha perdido relevancia. La radio ya vivió su crisis existencial con el surgimiento de la televisión y la digitalización es más una oportunidad que una amenaza. Pero la austeridad de la Cuarta Transformación (4T) la hará sufrir lo que resta del año. Los ganadores de las 141 frecuencias de radio que por primera vez se licitaron en 2017 después de 20 años (y las 41 frecuencias que se prevé licitar en 2019) no contaban en sus previsiones de negocio que el nuevo gobierno federal recortaría el gasto en comunicación social, ni que la economía nacional se desaceleraría tan pronto.
“La ruptura de Loret de Mola con Radio Centro puede tener ingredientes para la especulación, pero está más relacionada con el rating y una decisión corporativa que con la Cuarta Transformación de López Obrador o un atentado contra la libertad de expresión”, afirma el colaborador de BuzzFeed News México.
Sin Anestesia, el noticiero de Carlos Loret de Mola, nunca tuvo la potencia para mejorar el volumen de audiencia de El Club de los Beatles. En octubre de 2017, el rating de Universal Stereo 88.1 FM era superior al rating con el que se despide Loret, escribe José Soto Galindo en este artículo para BuzzFeed News México.
Los datos en los que basa su afirmación son originales de INRA a las que tuvo acceso, una casa de medición de audiencias en radio y televisión utilizada por buena parte de la industria radiofónica, y que muestran las siguientes tendencias:
Carlos Loret de Mola vs. El Club de los Beatles, en Universal Stereo 88.1 FM. Universal Stereo 88.1, La Estación de los clásicos, transmitió durante ocho meses el noticiero Sin Anestesia, conducido por el periodista Carlos Loret de Mola. El noticiero sustituyó a El Club de los Beatles, un programa de larga tradición en esa frecuencia de Grupo Radio Centro.
El programa del periodista Carlos Loret de Mola en Universal Stereo 88.1 FM tuvo apenas 8 meses de vida. El lunes, Loret de Mola anunció en su cuenta de Twitter que su noticiero en esa estación de radio de la Ciudad de México llegaba a su fin hoy viernes: “Esta es la última semana de nuestro programa de radio #SinAnestesia”.
El anuncio, escueto, de 11 palabras, dio pie toda la semana a teorías de la conspiración y a reclamos contra Grupo Radio Centro, concesionario de la frecuencia 88.1 FM, por su supuesto ataque a la libertad de expresión, representada —claro— en Loret de Mola.
Datos de tráfico que me compartió INRA, una casa de medición de audiencias en radio y televisión utilizada por buena parte de la industria radiofónica, muestran que la decisión fue equivocada: Loret pudo llevar su fama y reputación periodística a Universal Stereo, pero fueron insuficientes para igualar y mucho menos superar la audiencia de los Beatles.
Loret de Mola deja su programa con un rating en octubre de 2018 de 0.470 puntos contra los 0.669 puntos que alcanzaron los Beatles en octubre de 2017. Una audiencia de dos terceras partes respecto a la de su antecesor.
Según los datos de INRA a los que tuve acceso, en ocho meses de Sin Anestesia cambió el perfil del radioescucha de Universal Stereo: de convocar a una audiencia igualitaria entre hombres y mujeres (55-45%), Sin Anestesia atrajo mayoritariamente a hombres (70-30%). También hubo cambios socioeconómicos: creció la audiencia con mayor poder adquisitivo (A/B, en términos de mercadotecnia) y disminuyó la de menores ingresos económicos (D).
El lunes, horas después del tuit de Loret, Radio Centro se vio obligado comunicar públicamente la renovación de su división de noticias, que tendrá a Carmen Aristegui como titular. Otros conductores de la cadena, como Sergio Sarmiento y Guadalupe Juárez, estuvieron de acuerdo con los planes corporativos. Loret de Mola dijo No y hoy transmitió la última edición de Sin Anestesia.
Una vocera del equipo de producción de Loret me respondió lo siguiente cuando solicité un comentario para este artículo:
“Los cambios repentinos de condiciones laborales de Radio Centro obligaron a dejar Sin Anestesia, espacio que en muy poco tiempo logró ser referencia informativa y de conversación. Es justo comparar a Sin Anestesia con otros noticieros. Era el de mayor rating de Radio Centro, según el propio INRA. La audiencia nunca fue un tema en los planteamientos de Radio Centro. Agradecidos con la audiencia y con todas las voces que a diario sumaban opinión y análisis”.
La ruptura de Loret de Mola con Radio Centro puede tener ingredientes para la especulación, pero está más relacionada con el rating y una decisión corporativa que con la Cuarta Transformación de López Obrador o un atentado contra la libertad de expresión.
El mundo no acaba hoy para Loret. Le quedan su columna en El Universal y su protagonismo como anchorman (presentador de noticias) de Televisa. También sus buenas relaciones con otros dueños de medios de comunicación. Y esas valen oro.
Periodista. Desde 2010 edita la versión digital de El Economista en la Ciudad de México. Maestro en Transparencia y Protección de Datos Personales por la Universidad de Guadalajara. Tiene especialización en derecho de las telecomunicaciones y las tecnologías de la información. Contacto: soto.galindo@gmail.com https://twitter.com/holasoto https://economicon.mx
Contactar a José Soto Galindo en soto[arroba]economicon.mx
Loret de Mola no será el primer periodista que enfrente una demanda de este tipo. Un eventual proceso en su contra volverá a encender las alarmas sobre la judicialización del periodismo en México y las distintas maneras de callar y censurar a los periodistas. Como en todo, hay casos más complejos que otros, pero vale la pena tenerlos en la mira, escribe José Soto Galindo en este artículo para Buzzfeed News México.
La maestra Elba Esther Gordillo fue dueña del SNTE, el sindicato federal de maestros de México, de 1989 a 2013. Al inicio del gobierno de Enrique Peña Nieto fue aprehendida por los supuestos delitos de desvío de recursos del sindicato, delincuencia organizada y lavado de dinero (operaciones con recursos de procedencia ilícita).
El 7 de agosto de 2018, luego de 5 años, 5 meses y 11 días bajo arresto, fue puesta en libertad. La maestra regresó con todo: primero ofreció un mensaje público de unos 12 minutos para advertir que recuperará su liderazgo político y, dos días después, su abogado anunció que demandará por daño moral al periodista Carlos Loret de Mola.
En el Código Penal Federal no existen los delitos de difamación, calumnia o injurias. Lo que existe como conducta ilícita a nivel federal, relacionada con el ejercicio del periodismo, es el daño moral. El Código Civil Federal define el daño moral como “la afectación que una persona sufre en sus sentimientos, afectos, creencias, decoro, honor, reputación, vida privada, configuración y aspecto físicos, o bien en la consideración que de sí misma tienen los demás”.
Loret de Mola no será el primer periodista que enfrente una demanda de este tipo. Un eventual proceso en su contra volverá a encender las alarmas sobre la judicialización del periodismo en México y las distintas maneras de callar y censurar a los periodistas. Como en todo, hay casos más complejos que otros, pero vale la pena tenerlos en la mira.
1. El club de los 10 millones de pesos
Loret de Mola se unirá a una lista cada vez más abultada de periodistas que enfrentan demandas por daño moral. El exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira, demandó al analista Sergio Aguayo y exigió en tribunales una indemnización de 10 millones de pesos. A Moreira no le gustó que Aguayo opinerada que su carrera política “olía a corrupción y que era un ejemplo de impunidad”.
El abogado de Emilio Lozoya Austin amenazó con presentar demandas por daño moral contra quienes resulten responsables de la supuesta “campaña mediática” en su contra. La amenaza pareció estar dirigida a los periodistas Ignacio Rodríguez Reyna y Alejandra Xanic, quienes han dedicado los recientes dos años a documentar los vínculos de Lozoya, exdirector general de Pemex, con el departamento de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. Rodríguez Reyna dirige la multipremiada revista emeequis y Alejandra Xanic es el único mexicano que ha ganado un Pulitzer en periodismo.
Otro caso es el de Carmen Aristegui. El empresario Javier Vargas, propietario de MVS, considera que la periodista dañó su reputación en el prólogo del libro La casa blanca de Peña Nieto: La historia que cimbró un gobierno. En el texto introductorio al reportaje sobre una mansión que Peña Nieto compró a un proveedor de gobierno, Aristegui describió la relación de Vargas con el presidente y hace consideraciones sobre la manera en que ésta pudo influir para evitar la publicación del reportaje.
También paradigmático fue el caso Marta Sahagún vs. Olga Wornat y la revista Proceso, por el libro biográfico La Jefa. En el libro, Wornat abordó detalles de la vida privada de Sahagún que no gustaron a la esposa del entonces presidente Vicente Fox Quesada.
2. Los poderosos y la libertad de expresión
Para el relator especial sobre la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las demandas por daño moral o las denuncias por difamación, calumnia o injurias donde se puedan sirven a los poderosos como herramienta para inhibir la libertad de expresión.
El delito de difamación está vigente en Guanajuato, Nuevo León, Baja California Sur, Nayarit, Michoacán y Yucatán. El delito de calumnia está vigente en Hidalgo, Guanajuato, Nuevo León, Baja California Sur, Sonora, Nayarit, Zacatecas, Colima, Michoacán, Campeche y Yucatán, como documenta Eréndira Aquino en un artículo de Animal Político.
“Muchos funcionarios de gobierno o jerarcas públicos invocan las leyes penales sobre la calumnia, la injuria y la difamación de la misma forma que las leyes de desacato, con la misma intención de silenciar a los periodistas cuyos artículos periodísticos critican asuntos de interés público”, describe la CIDH.
Las demandas y denuncias no son las únicas herramientas utilizadas para callar y censurar periodistas, pero tienen una gran efectividad. Un proceso judicial suele ser engorroso y apuesta al agotamiento de alguna de las partes, sobre todo de la que tenga menos tiempo y dinero. Si un periodista no tiene el apoyo de su medio de comunicación, tendrá que hacer uso de recursos propios o esperar la solidaridad de terceros. Y, para bien o para mal, no todos los periodistas en México tienen la fama de un Loret de Mola o una Carmen Aristegui.
Periodista. Desde 2010 edita la versión digital de El Economista en la Ciudad de México. Maestro en Transparencia y Protección de Datos Personales por la Universidad de Guadalajara. Tiene especialización en derecho de las telecomunicaciones y las tecnologías de la información. Contacto: soto.galindo@gmail.com https://twitter.com/holasoto https://economicon.mx
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